Khawaja Asif llama a los países musulmanes a unir fuerzas frente a agresiones externas, destacando ataques de Israel y la influencia de Estados Unidos sobre conflictos en Medio Oriente.
El ministro de Defensa de Pakistán, Khawaja Asif, lanzó un llamado contundente a los países musulmanes para conformar una alianza militar inspirada en la estructura de la OTAN, con el fin de protegerse ante los crecientes desafíos y amenazas en la región. Durante una entrevista con la cadena Geo News, Asif enfatizó la necesidad de que las naciones islámicas reconozcan la hipocresía internacional y diferencien entre aliados aparentes y verdaderos enemigos.
Asif señaló que la reciente ofensiva de Israel contra Catar constituye un ejemplo de cómo potencias externas intervienen en asuntos regionales con fines propios. El ministro precisó que el ataque se efectuó con el respaldo de Estados Unidos, y que incluso líderes del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) se encontraban en Doha por indicación estadounidense al momento de la ofensiva.
“El impacto de este tipo de acciones es profundo y sus efectos se manifestarán con el tiempo, generando inevitablemente reacciones en la región”, advirtió Asif, quien también denunció que situaciones similares se repiten en Siria, donde el cambio de gobierno refleja la aprobación de Estados Unidos, mientras Israel mantiene ataques constantes contra su territorio.
El funcionario pakistaní recordó episodios históricos que ilustran esta dinámica. Mencionó que Osama Bin Laden, exlíder de Al-Qaeda, fue trasladado por la CIA desde Sudán a Afganistán, destacando cómo las potencias manipulan actores locales para sus intereses estratégicos, dejando consecuencias duraderas para la región.
Ante esta realidad, Asif subrayó que la creación de un bloque militar islámico permitiría una defensa mutua entre países musulmanes, sin que el objetivo sea confrontar a un país específico, sino garantizar protección frente a agresiones externas.
El contexto actual incluye ataques recientes de Israel contra infraestructura civil y estratégica en Yemen, incluyendo puertos y centrales eléctricas, provocando decenas de muertes. Además, en junio, Tel Aviv lanzó un ataque mortal contra Irán, dejando más de mil víctimas, al que siguió la intervención directa de Estados Unidos sobre instalaciones nucleares iraníes con fines pacíficos.
Estos eventos han motivado condenas internacionales y llamados a detener la violencia, aunque las respuestas siguen siendo fragmentadas y limitadas. Para Asif, esta situación evidencia la necesidad urgente de que los países musulmanes fortalezcan su capacidad de defensa y coordinación ante amenazas externas que afectan la seguridad, la soberanía y la estabilidad regional.
El planteamiento pakistaní busca iniciar un debate sobre la autonomía estratégica del mundo musulmán, resaltando que la historia reciente muestra cómo la falta de cohesión y la dependencia de potencias externas agravan conflictos y socavan la estabilidad de la región. La propuesta de Asif, por tanto, no solo apunta a un mecanismo militar, sino a la construcción de una voz unificada que pueda proteger intereses colectivos y garantizar un equilibrio frente a la intervención extranjera.
