En 2025, el Banco Central de Bolivia proyecta adquirir 17 toneladas de oro del mercado local, reforzando la estabilidad financiera y asegurando recursos para compromisos internacionales y nacionales.

El Banco Central de Bolivia anunció que este año planea ampliar significativamente sus adquisiciones de oro en el mercado nacional, con el objetivo de fortalecer las reservas internacionales del país y garantizar la liquidez necesaria para operaciones financieras estratégicas. Edwin Rojas, presidente del ente emisor, confirmó que se espera comprar aproximadamente 17 toneladas de oro durante 2025, superando los 15 toneladas adquiridas en 2024.

Rojas señaló que estas compras no se limitan a la acumulación de reservas, sino que forman parte de una estrategia más amplia que permite realizar operaciones financieras de inversión, generando recursos que respaldan obligaciones estatales prioritarias. “La ley nos faculta para adquirir oro del mercado local y ejecutar operaciones financieras, y eso es lo que venimos cumpliendo”, aseguró durante su entrevista con medios nacionales.

Una de las operaciones más recientes, iniciada en abril del año en curso, consistió en la venta a futuro de tres toneladas de oro. Esta transacción, que se cerró con éxito la semana pasada, permitió al Banco Central generar más de 388 millones de dólares, recursos destinados a cumplir con compromisos como la deuda externa y la importación de combustibles. Rojas precisó que el monto se distribuyó en dos fases: 270 millones al inicio de la operación y 118 millones al finalizarla, con costos financieros inferiores al 2%, lo que demuestra la eficiencia de la gestión.

La Ley 1503, promulgada en mayo de 2023, establece que el Banco Central puede comprar oro del mercado interno y utilizarlo en operaciones internacionales, un mecanismo que refuerza la solidez de las reservas y la capacidad de respuesta ante eventualidades económicas. Para el presidente del BCB, esta normativa ha sido clave para garantizar que el país cumpla con sus compromisos, evitando riesgos de incumplimiento o default, incluso frente a advertencias de analistas y calificadoras de riesgo internacionales.

El fortalecimiento de las reservas mediante la compra de oro también representa un respaldo directo a la economía local, ya que fomenta la participación de los productores nacionales en un mercado regulado y confiable. Cada transacción permite que los recursos circulen dentro del país, generando ingresos y consolidando la confianza en el sistema financiero boliviano.

De esta manera, la estrategia del Banco Central combina la seguridad de las reservas con la optimización de los recursos financieros, manteniendo una planificación que busca proteger la estabilidad económica y brindar certidumbre frente a los compromisos internacionales. La adquisición proyectada para 2025 refleja la continuidad de un enfoque orientado a fortalecer la economía y garantizar la capacidad del Estado de responder a sus necesidades financieras sin comprometer la sostenibilidad del sistema.