La advertencia se produce luego de que simpatizantes de un equipo de fútbol argentino anunciaran su intención de sumarse a la movilización en apoyo a los jubilados

Con datos de Telesurtv.net

El Ministerio de Seguridad Nacional de Argentina anunció que aplicará «estrictas medidas» para garantizar el orden y la seguridad pública en la marcha de jubilados convocada para este miércoles 12 de marzo en las inmediaciones del Congreso de la Nación Argentina.

El comunicado del organismo advierte que cualquier persona que incurra en «conductas que afecten la seguridad» o realice «acciones contrarias a la ley» será identificada y detenida.

La advertencia se produce luego de que simpatizantes de un equipo de fútbol argentino anunciaran su intención de sumarse a la movilización en apoyo a los jubilados.

Según medios locales, el llamado a la participación de los hinchas surgió por la iniciativa de un socio vitalicio del club «Funebrero», conocido como Carlos, quien ha estado presente en diversas manifestaciones.

En respuesta, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, calificó la convocatoria como «La Marcha de las Barras Bravas» y subrayó que habrá sanciones contra quienes alteren el orden público.

“Si querés ir y quedarte parado, podés quedarte parado. Le levantás una mano a un policía y vas preso”, advirtió Bullrich en declaraciones a la prensa local, enfatizando que no se tolerarán desmanes ni disturbios.

El Ministerio de Seguridad también amenazó con la posible aplicación de restricciones bajo la figura de «Concurrencia Administrativa a todo evento deportivo», lo que implicaría la prohibición de ingreso a estadios de fútbol en cualquier parte del país para quienes participen en la protesta de manera violenta.

La Coordinadora de Hinchas acusó al Gobierno de intentar «deslegitimar» la convocatoria y generar temor para reducir la participación.

Sin embargo, el Ministerio de Seguridad insiste en que sus medidas buscan reafirmar «el compromiso con la seguridad ciudadana, el respeto por la ley y el orden público».

El comunicado finaliza instando irónicamente a los manifestantes a «expresarse de manera pacífica y dentro del marco de la legalidad».