La mejora en la cotización de los bonos soberanos refleja el respaldo internacional a las políticas económicas aplicadas por Bolivia, que logró incrementar sus reservas, pagar su deuda externa puntualmente y fortalecer su liquidez con oro refinado.
La economía boliviana comienza a recoger frutos concretos de una gestión financiera que prioriza la responsabilidad y el equilibrio. De acuerdo con el Banco Central de Bolivia (BCB), los bonos soberanos del país —específicamente los correspondientes a 2028 y 2030— han registrado un repunte sostenido en los mercados internacionales durante julio, consolidando la percepción de que Bolivia vuelve a ser un emisor confiable.
Este comportamiento positivo responde a tres factores clave que han generado confianza entre los inversionistas globales: el crecimiento de las Reservas Internacionales Netas (RIN), el cumplimiento cabal del servicio de la deuda externa y la implementación efectiva de la monetización del oro nacional.
En el primer semestre de 2025, las RIN crecieron un 42%, alcanzando los $us 2.807 millones. Esta cifra no solo representa una recuperación importante frente al cierre de 2024, sino que también supera los criterios internacionales de cobertura de importaciones y pagos externos. Esta robustez en reservas aporta estabilidad y previsibilidad a la economía nacional.
Por otro lado, Bolivia ha cumplido sin retrasos sus obligaciones con acreedores internacionales, realizando pagos por $us 764 millones en los primeros seis meses del año. Esta disciplina fiscal ha sido mantenida a pesar de las dificultades políticas internas, incluyendo la falta de aprobación de créditos externos por parte de la Asamblea Legislativa.
Un tercer eje de la estrategia ha sido la puesta en marcha de la Ley del Oro, que permitió al BCB convertir parte del oro nacional en divisas. Este proceso —que incluyó la compra, refinación y certificación del metal— ha sido valorado por analistas internacionales como un mecanismo innovador para fortalecer la liquidez del país. El banco Barclays, por ejemplo, destacó que esta política ayuda a reducir el riesgo soberano al asegurar recursos frente a choques externos.
El repunte de los bonos soberanos es un indicador directo de que los mercados valoran estos esfuerzos. En tiempos en los que muchos países enfrentan dudas sobre su solvencia, Bolivia ha logrado generar una señal de confianza y solvencia que podría abrir nuevas puertas al financiamiento internacional, si el contexto político lo permite.
El BCB ha subrayado que estos logros no son casuales, sino resultado de un enfoque técnico sostenido y de decisiones oportunas que priorizan la estabilidad frente a los discursos populistas o las tensiones coyunturales.
